El siguiente paso fue leer un libro largo los dos juntos, por capítulos. Surgió por casualidad, Mario tiene en su habitación muchos libros que yo había guardado de cuando era pequeña, mis favoritos. Uno de ellos es El Mago de Oz, en una edición preciosa de Anaya. Siempre la ha llamado la atención este libro, y antes del verano me pidió que lo leyéramos juntos.
Pensé que se iba a aburrir, pero todos los días me lo recordaba, y nos íbamos un rato a su cama, los dos tumbados juntos, para que le leyera un capítulo o dos y viéramos las ilustraciones. Le encantó la historia y me acordé de la peli. Así que cuando terminamos el libro se la puse. Para mi sorpresa, me iba contando lo que iba a pasar (no sabía hasta qué punto había escuchado todo lo que le leía) e incluso se indignó (igual que su madre en esto) cuando vio que había un par de cosas del libro que en la película habían cambiado. Tenemos pendiente leer algún otro de esta colección, pero ahora prefiere un papel más activo en los cuentos.
Lo siguiente es que por la noches al acostarle, en lugar de pedirme nuestra canción, me comenzó a pedir un cuento. Cada noche me proponía un tema y yo tenía que contarle un cuento sobre eso. Empezamos con piratas, caballeros y sirenas; pero al llegar el verano ha comenzado la época de las profesiones y los rescates así que todos los cuentos son de basureros, médicos, policías, bomberos, helicópteros y cosas similares. Los cuentos que más le gustan, me pide que los repita otras noches y como se acuerda de ellos, se los tengo que contar igual.
Y en las vacaciones comenzamos con un proyecto en casa en el que todavía estamos: escribir nuestros cuentos favoritos juntos. Yo no soy muy buena dibujando, así que buscamos en Google dibujos para colorear que representen las escenas más importantes del cuento. Imprimimos uno por página con hueco para escribir y entre los dos coloreamos cada dibujo y escribimos debajo el texto en mayúsculas, Cuando terminamos, hacemos una portada y ponemos nuestras fotos y nombres (que para algo somos "los autores", como dice él).
De momento hemos escrito el de los basureros y el de los bomberos, dos de sus favoritos. Y ahora quiere el más difícil todavía: que hagamos los dibujos nosotros. Hace un mes que Mario pasó de los dibujos "abstractos", jaja, por decirlo de alguna manera, a los figurativos. Así que ahora quiere que los hagamos todo nosotros. Y también le gusta que hagamos teatrillos (o con nosotros o con los amigos) y representemos los cuentos que nos inventamos.
Todavía me acuerdo de cuando me preocupaba porque era un culo inquieto y no había manera de que se sentara 30 segundos a mirar o escuchar un cuento. Quién le ha visto y quién le ve. Estos Reyes seguro que una de las cosas que nos pide son cuentos!
Mhhhh! El día que menos te lo esperes te veo publicando un cuento....
ResponderEliminarEditora ya tienes! ;)
Un beso!
Pues mira, ahora lo que me faltaba. Pero no lo descarto en el futuro, me encanta escribir!! Y teniendo editora... Suerte con el proyecto, te sigo. Un beso.
ResponderEliminar