Es lo que hemos tenido durante unos días y ha sido una desesperación. Mario se lo ha hecho todo todo todo encima durante unos días, sin ningún tipo de complejo. No ha pedido el orinal ni una sola vez. Y esto no nos pasó ni el primer día que le quitamos el pañal...
Encima ha coincidido con unos días de lluvia, y no hay manera de lavar y secar tanta ropa, ni con los radiadores. Así que algún día Mario ha terminado con unos modelos de lo más exótico.
Tal y como ha venido se ha ido, y creemos que tenemos una explicación, pero claro, es cosa nuestra, nada seguro. Hemos tenido algún día malo en todo el proceso de quitar el pañal, normalmente ha sido por protesta (porque estaba enfadado con nosotros por algo) o por malestar (dientes, sobre todo). Pero esto implicaba algún pis o caca, y algún día aislado. No todo y tantos días.
La única vez que nos había pasado esto fue cuando le confundimos por hacer las cosas diferentes en casa y en la guardería, cuando empezamos a llevarle sin pañal a clase y le sentaban en el orinal cada 15 minutos.
Y resulta que investigando, justo estos días la cuidadora de Mario ha estado de vacaciones y Mario se ha quedado con una chica nueva que además no le conocía de nada. Todavía es el único con calzoncillo en su clase, por lo que sospechamos que las cosas se han hecho diferentes y Mario se ha vuelto a liar. Con mucha paciencia en casa, volviendo a insistir con las rutinas de siempre, y al volver Raquel a la guarde, parece que todo solucionado. Un descanso para la fregona, para la lavadora y para nosotros, uf.