Para 24 unidades de tamaño medio, batir con la batidora 200 g de azúcar (blanco o moreno) y 2 huevos. Añadir medio vaso grande de leche (de la tipo 3), medio vaso grande de aceite de oliva, la ralladura de un limón y la ralladura de una naranja. Batir de nuevo. Añadir después 50 g de maicena, medio sobre de levadura y una pizaca de sal. Batir de nuevo. Por último, añadir poco a poco y mezclando con una espátula 200 g de harina.
Llenar los moldes de papel a un tercio de capacidad y hornear a 250º durante 10 minutos con el horno precalentado.
Estas son las sencillas y a Mario le encantan, tanto secas como bien mojadas en leche, para el desayuno o para la merienda. Pero se les pueden añadir otras cosas: unos trocitos de fruta (con fresa salen muy buenas), un poco de canela o vainilla, etc.
Actualización: Se me olvidaba, se conservan estupendamente en bolsitas de plástico con un nudo, nosotros las ponemos de 4 en 4 y duran algo más de dos semanas sin ponerse duras.
Actualización: Se me olvidaba, se conservan estupendamente en bolsitas de plástico con un nudo, nosotros las ponemos de 4 en 4 y duran algo más de dos semanas sin ponerse duras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario